viernes, 23 de mayo de 2014

Diario de a bordo


Un candidato apabullado frente a unas sensaciones valencianas

Hoy acaba la campaña electoral más sosa y desinformativa que recuerdo. Ha sido una campaña en la que salvando ciertas honrosas excepciones, poco se ha hablado sobre lo que estaba en liza, es decir sobre política europea; ha habido debates artificiales sobre el sexo de los ángeles, empezando por una candidata socialista, que en un debate electoral, hubiera podido quedar muy elegante, lamentando en primer lugar el asesinato de una política del partido que tenía enfrente, en plena campaña electoral. Esto le habría honrado y habría humanizado el debate. Pero no era precisamente humanizar el debate, la intención de la candidata, sino todo lo contrario, atacar al candidato popular con un argumento fuera de contexto y propio de unas elecciones generales, cuál era el tema del aborto libre.
Esta candidata en su sectarismo, se resiste a entender que cada partido cuando está en el poder hace lo que le parece; igual hicieron ellos cuando estuvieron 20 años en el gobierno de la nación.

Al día siguiente el candidato popular que no había destacado demasiado, metió la pata hasta las orejas. Quien se deja arrastrar por la artera manipulación sectaria de la adversaria, puede haber sido muy buen ministro, pero demuestra poca astucia y poco temple. Lo veo así.  
El candidato popular no debía de haberse metido en estos jardines de las sensaciones valencianas; hubiera quedado mucho más elegante y entonces puede que hubiera podido demostrar tener una cierta superioridad de miras sobre la candidata zapaterina, si es que como dicen algunos, eso era lo que deseaba.

Desde hace unos días no se pueden publicar encuestas, pero si no recuerdo mal, las últimas decían que con la campaña de sensaciones valencianas y todo, el PSOE se mueve en un abanico de intención de voto, que va desde el 27 al 29%, cuando los populares todo y habiendo presentado la imagen de un candidato apabullado -a lo que alguien ha dado en llamar el efecto cañete–, pero con experiencia en la política europea, se mueve en un abanico que iría entre el 33 y el 35%, con lo cual Rubalcaba podría tener serios problemas, pues es muy posible que a corto plazo, desde dentro de su partido pidan su cese como secretario general. De la misma manera que Valenciano también puede tenerlos después, pues Chacón acaba de saltar a la arena y le puede dar mucho juego.

No obstante a mi modo de ver, el problema que tiene Rubalcaba tiene dos patas: la primera es el diseño de una campaña en la que no se proponen soluciones europeas, sino nacionales, la otra pata la constituyen dos partidos minoritarios al alza, que mueven las fronteras de su electorado: por la izquierda le ataca IU y por la derecha UPyD, esto sin contar con otros dos: Podemos y Primavera Europea, que también “ayudan”.
A ello se suma la mengua de los graneros de votos socialistas: en Andalucía con la mancha de los ERES-Cursos de Formación, y en Cataluña, donde persiste la hemorragia socialista, con un PSC continuamente en fuga no se sabe hacia dónde y con unos contradictorios golpes de timón, escisiones personales etc. Ya sólo faltaba la presencia de Pascual Maragall  -y su hermano Ernest, ex conseller- en el mitin central de ERC  ¡Esto es la leche!
Por si fuera poco, al PSC también le mueve las fronteras de voto Ciutadans que está en alza.
Los augures en su ejercicio de adivinación, presagian malos momentos para el PSC; ¿Cómo hará Pere Navarro para justificarse ante sus bases? ¿Es quizás esta, la ocasión que estaban esperando los críticos para desbancarle?

Los candidatos soberanistas de CiU y ERC también hicieron lo propio al derivar en todo momento el debate hacia el discurso soberanista y en favor del independentismo, lanzando amenazas veladas  –o quizás no tan veladas- en caso de que el gobierno de la nación no acepte sus propuestas de consulta. Pasaron de puntillas sobre las propuestas europeas, lo cual demuestra cual era su intención.

¿Cuándo entenderán todos, que hay un momento para cada cosa y una cosa para cada momento?
¿Por qué ha habido partidos que tozudamente, no nos han mostrado sus propuestas europeas, será que no las tienen, o será que haciendo gala de un feo cinismo permitido, lo único que les interesa es defender sus puestos de poder y sus buenos sueldos?

En resumen, ha sido esta una campaña electoral fea, plagada de propuestas ajenas a la misma, con el “y tú más” a flor de piel, y de la que nos ha faltado el poder contrastar las propuestas de todos, sobre la futura gobernanza de la Unión Europea, eso sí, alguno ha hablado incluso del futuro de Escocia, supongo que será por si los escoceses anduvieran faltos de ideas.
Que nos sea leve, porque esto no es regeneración política, sino más de lo mismo.

Mijail

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