jueves, 17 de enero de 2013
Col·laboradors
Las reglas monacales que regían tanto en los monasterios católicos desde la Edad Media, como en los monasterios budistas e hinduistas son parecidas; entre los católicos, se centraban en comer sólo lo necesario, siempre a la misma hora y en silencio, además entre los asiáticos, son muy estrictos con la alimentación. Lo usual, sin embargo, es que en ambas comunidades, sus residentes estén más bien delgados.
En nuestra sociedad estos
valores alimentarios, digamos monacales, han desaparecido de nuestras normas.
La corriente alimentaria, “mindful eating”, parece estar sintonizando con las
normas monacales, intentando recoger el espíritu de estas reglas. Es esta una
corriente de pensamiento que nació en Estados Unidos hace 30 años y que está penetrando ahora en Europa, sin entrar en su contenido religioso. A grandes rasgos viene a decir: no sólo
comemos de una forma totalmente rutinaria, sino que engullimos sin pensar
siquiera lo que estamos comiendo. No se debe comer de una forma automática,
sino consciente; “mindful eating”, o alimentación consciente.
La
regla principal es muy simple: Come lo que quieras, pero (y aquí viene lo
importante) sólo si tienes hambre. Las dietas se centran en qué comemos, aquí
sin embargo, se fijan en para qué comemos.
Dan algunos consejos para iniciarse de alguna manera en esta teoría:
- Preguntarse para que vas
a comer; si la respuesta es que te sientes aburrido, no comas, trata de
resolver ése problema de otra forma.
- Como fuere, que en
ocasiones no sabemos distinguir entre hambre y sed, si sientes hambre, primero
bebe un vaso de agua, en muchas ocasiones desaparece el hambre.
- Come saboreando todo,
disfrutando lo que puedas de cada comida.
- Cuando masticas debes
concentrarte en la comida y no en pinchar un nuevo bocado con el tenedor, como
si tuvieras prisa; entre bocados, el tenedor se deja sobre la mesa.
- Procura comer en un
lugar agradable y en silencio; mucho mejor si no ves la televisión. La
televisión te desconcentra de lo que estás haciendo: comer.
- Si quieres adelgazar
debes visualizar tu objetivo; tienes que imaginártelo.
- Procura acabar de comer
siempre el último, no tengas prisa; si observas entre tus habituales compañeros
de mesa, lo más probable es observar, que quien acaba siempre el último no
padece sobrepeso.
Etiquetas: adelgazarmedmieat
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