miércoles, 11 de abril de 2012

El Confidente



Comida desperdiciada en tiempos de crisis

Hay crisis, recortes, ajustes y apretadas de cinturón, pero a pesar de todo seguimos desperdiciando comida. Según la asociación de consumidores FACUA, cada español tira al año algo más de 60 kilos de comida en buen estado. Una parte la tiran al cubo de la basura, los establecimientos al ver que quedan un par de días para alcanzar su fecha de caducidad, otra parte la tiramos los propios consumidores, que no hemos aprendido a consumir la sobras, ni tenemos conciencia anti derroche.
Hay establecimientos que nos bombardean con sus ofertas de 3 por 2. Parece un ahorro pero hemos acabado pagando 2 cuando sólo queríamos comprar una, o quizás ni tan siquiera habíamos pensado en comprar ninguna.

Según FACUA, una décima parte de los 645 kilos de alimentos que cada español compra anualmente, acaba en el cubo de la basura estando en buen estado. Y esto está sucediendo en el mismo país donde 1,5 millones de personas pasan hambre según la Federación Española de Alimentos.

Algunos establecimientos no sólo desperdician comida, sino que además después de tirarla al contenedor la rocían con lejía u otros productos de limpieza, para que no pueda ser aprovechada por quienes rebuscan.
De entre los establecimientos comerciales que se deshacen de comida en buen estado sobresale Eroski, que abastece diariamente a los bancos de alimentos, de frescos y próximos a caducar; estiman que donan cada año unas 3.600 toneladas de alimentos cuyo destino hubiera sido acabar en el vertedero.

Acaban de poner cifras al despilfarro en comida: los españoles acabamos tirando 2,9 millones de toneladas, que darían de comer a la mitad de población de Somalia (4,6 millones de habitantes) durante un año: 242.000 toneladas de carne, 111.000 de pescado, 330.000 de fruta, 27.000 de arroz, 139.000 de patatas, 220.000 de pan, 396.000 litros de leche.
En total el derroche alimentario de los españoles tiene un coste; casi 7.000 millones de euros de comida en buen estado que acaba pudriéndose en cubos de basura y vertederos.

Con todo, nuestras cifras son discretas si las comparamos con otros países: En EEUU la cifra de comida desperdiciada alcanza hasta un 40%, según estudio de la Universidad de Arizona. Tiran 54 millones de toneladas, con las que se podría alimentar a 73 millones de habitantes.
En Gran Bretaña, según la oficina medioambiental británica, se alcanza hasta un 25%. Tristram Stuart, ha publicado un libro denunciando este derroche. Poniendo cifras; cada año se tiran hasta 484 millones de yogures sin abrir, 1.600 millones de manzanas en perfecto estado o 2.600 millones de rebanadas de pan en buen estado se arrojan a la basura. Tiran 5,4 millones de toneladas; con las que se podría alimentar a 8,6 millones de habitantes.


Ya que nos vemos obligados a vivir rodeados de ajustes y recortes, impuestos por la UE y el gobierno, debido a nuestras deudas, parece que lo coherente, sería que el propio gobierno hiciera pedagogía anti derroche alimentario, para evitar que sean desperdiciados alimentos.

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