miércoles, 14 de julio de 2010
El Confidente
La reforma laboral de Zapatero abarata el despido
El propio Zapatero admitió el pasado día 10 que la reforma que aprobó el Gobierno y convalidó el Congreso de Diputados, abarataría el despido y sería duradera, “sin recortar los derechos de los trabajadores”. ¿Quién puede creer tal cosa? Es decir, que podemos ser despedidos con más facilidad y a eso le llama no recortar derechos?
Ante este panorama, los sindicatos UGT y CCOO no podían por menos que rechazar la propuesta, aun cuando no quiera decir con ello, que sean paradigma de grandes defensores de la clase obrera, pero hay cosas que son infumables. Si bien, la ampliación de las causas para considerar procedente un despido, y los costes de las indemnizaciones fueron las dos principales cuestiones que hicieron imposible el consenso.El propio Zapatero admitió el pasado día 10 que la reforma que aprobó el Gobierno y convalidó el Congreso de Diputados, abarataría el despido y sería duradera, “sin recortar los derechos de los trabajadores”. ¿Quién puede creer tal cosa? Es decir, que podemos ser despedidos con más facilidad y a eso le llama no recortar derechos?
Que Zapatero la justifique diciendo que: “Queremos un modelo en el que la contratación indefinida sea la norma frente a la contratación temporal. Queremos reducir el esfuerzo en el coste del despido, sin que los trabajadores pierdan derechos y queremos hacer un cambio en la flexibilidad interna de la empresa”. En cualquier caso, esta reforma laboral no servirá para crear empleo (que es lo que a día de hoy de verdad necesitamos) y el tiempo lo dirá; sólo servirá para restar aún más derechos a los trabajadores por cuenta ajena.
UGT y CCOO, uniéndose por fin a CGT, acaban de tachar la reforma de “regresiva y lesiva" para los intereses de los trabajadores.
Está claro que la reforma laboral no va a eliminar una de las mayores injusticias del mundo laboral en nuestro país, que es la existencia de dos tipos de contrato: el contrato estable y el precario. A su vez, va a facilitar y abaratar el despido dado que se amplían las causas para hacerlo más fácil y a su vez, reducen de manera sustancial las indemnizaciones a las que tenían derechos los trabajadores.
Zapatero que en reiteradas ocasiones había proclamado que él nunca gobernaría a golpe de decretazo y que no se tocarían los derechos de los trabajadores, ahora ha hecho totalmente lo contrario, pero es que además hace pagar la crisis a los trabajadores, que tendrán que salir de la misma, en una situación de menores derechos y por tanto de mayor desigualdad con la clase empresarial.
Etiquetas: lareforlabdezp
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