sábado, 16 de enero de 2010

Col·laboradors




Estimado Sr. Zapatero:

Estoy trabajando desde que tenía 20 años (cuando terminé el servicio militar). Ahora tengo 45 años y mi esposa igualmente empezó a trabajar a los 22 años, en la actualidad tiene 43.

Desde esta fecha no hemos dejado de pagar en ningún momento, nuestros Impuestos sobre la Renta, Seguridad Social, desempleo, contribuciones, impuestos de vehículos, IVA, las tasas municipales, etc etc.

Como consecuencia de ello, me encuentro con que mi hija es penalizada a la hora de elegir colegio, porque sus padres trabajan (pagando impuestos).

Yo trabajo en una entidad financiera, en un barrio “pobre” de Córdoba en el que los subsidios del Gobierno, de la Junta de Andalucía, del Ayuntamiento de Córdoba, son totalmente habituales y concedidos a discreción, pero me sorprende que en muchas de las cuentas a las que llegan estas ayudas de emergencia social o solidarias, se permitan pagar recibos de Canal Plus por importes superiores a los 100 euros mensuales (yo personalmente me conformo con la TDT y eso que me gusta el fútbol un montón), se suelen pagar recibos de telefonía móvil por importes superiores a los 200 euros mensuales en muchos casos (yo en mi casa cuando entre los dos teléfonos pagamos más de 50 euros pillo un rebote de impresión) y otras perlas por el estilo.

Estoy hasta las narices de que aparezcan por mi oficina, gente que viene a cobrar el desempleo cada día 10, a las 08:30 horas de la mañana, con toda la prisa del mundo “porque se tienen que ir a trabajar”, a un trabajo por el que no pagan impuestos y por el que no contribuyen a la Seguridad social, a esa misma Seguridad Social a la que si tienes la mala suerte de tener que ir te citan a seis meses vista, o que cierran plantas enteras de los hospitales en épocas vacacionales para ahorrar (tenemos una amiga que trabaja allí).

Por todo ello, Sr. Presidente, le ruego que deje la desgravación de vivienda como está y que el ordenador portátil que dice le va dar a mi hija y la bombilla, se los meta donde le quepan, que ya me encargo yo de comprarlos. Y que en vez de asesores contrate a más inspectores de trabajo, que controlen a los parados que no lo están.
Y que las Administraciones antes de dar ayudas con el dinero de los demás, comprueben que NO sean para ver el Madrid Barça o para llamar a la línea del Tarot de Lola Montero.

Sin otro particular, reciba un saludo de un currante que esperaba de Ud. una labor de gobierno justa, pero no la está viendo por ningún lado.

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